“Te escribo pues no consigo verme”. En ese verso, puesto en boca de uno de los múltiples interlocutores del juego de voces que ajetrea este libro de Rafael Saravia, podría cifrarse la clave mayor de Desprovisto de esencias, libro que da cuenta tanto de un reajuste de conciencia personal como de un estado de sitio general que afecta al andamiaje de la propia poesía. De esa doble crisis surge una necesidad de exteriorizar el aturdimiento propio de un extravío, lo que explica la constitución de estos poemas, estructurados en ese libro que ya desde el título y desde su composición alternativa en forma de estratos responde a esa pérdida de convicción, a esa conciencia de acorralamiento.
Desprovisto de esencias ha de ser leído como un ejercicio parejo al del pintor que tacha para desvelar, al del transeúnte que se encierra en un gabinete de clausura y lanza por la ventana hacia la nada los bastidores que un día llamaron su atención para apoyar las palabras del poema en verdades que ahora han reventado.”
(Tomás Sánchez Santiago)
Valoraciones
No hay valoraciones aún.